Recetas con Thermomix siempre resultan muy sencillas, prácticas y en poco minutos. Si alguna vez has probado este robot, sabes que se pueden hacer preparaciones tanto dulces como saladas porque una buena merienda, debe tener todos los condimentos. Hoy vamos a ver como se hace unos buenos panes de cerveza y queso cheddar.
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Por lo general, cuando nos imaginamos hacer un pan perfecto, se nos viene a la cabeza el solo el horno de la cocina. Bueno, con Thermomix no solo prenderas el horno, sino que vas a realizarlo en mucho menos tiempo que si fuera una receta tradicional. Sin más que decir, vamos a estos panes de cerveza con cheddar para la merienda.
Ingredientes panes para 8 personas
- 100 g de queso cheddar en trozos
- 225 g de cerveza negra
- 30 g de mantequilla a temperatura ambiente (y algo más para pincelar)
- 15 g de levadura prensada fresca desmenuzada
- 25 g de miel
- 300 g de harina de fuerza
- 100 g de harina integral de trigo
- 1 cucharadita de sal
Pasó a paso de los panes de cerveza
Para comenzar la receta, en el vaso de la Thermomix ponemos el queso cheddar y lo rallamos durante 5 segundos, a velocidad 7. Retiramos a un bol y reservamos. Sin lavar el vaso, ponemos 75 g de cerveza negra, la mantequilla, la levadura y la miel. Programamos 4 minutos, temperatura 37º y velocidad 1.
Para que los panes queden perfectos, añadimos 150 g de cerveza negra, la harina de fuerza, la harina integral y la sal. Amasamos programando 5 minutos, función espiga. Incorporamos 60 g de queso cheddar rallado reservado y amasamos programando 2 minutos, función espiga. Retiramos la masa a una superficie de trabajo y formamos una bola.
Dividimos la masa de panes en 8 porciones de aprox. 95 g cada una y les damos forma de bola. Las colocamos en la bandeja de horno preparada, cubrimos con film transparente y dejamos reposar en un lugar cálido durante 30 minutos. Mientras tanto, precalentamos el horno a 200º.
Para ir finalizando esta receta Thermomix de panes de cerveza con queso cheddar, pincelamos con mantequilla los panecillos y los espolvoreamos con el queso rallado restante. Horneamos durante 20 minutos, a 200º. Retiramos del horno, dejamos templar unos 30 minutos y antes de servir.