La textura del cheesecake es totalmente cremosa, de hecho a veces se pasa un poquito y el resultado es una tarta apelmazada y nada agradable al paladar, pero ¿Qué podemos hacer contra la naturaleza de la tarta de queso, cierto? Bueno, es un alivio que siempre haya rebeldes que rechacen la naturaleza, es por eso que hoy queremos presentaros la receta del cheesecake esponjoso. Este postre se lo debemos a la tiktoker Ginaspicnic, una cocinera muy reconocida y querida por los usuarios de esta red social gracias a su capacidad de transformar dulces típicos en preparaciones dignas de cuentos de hadas y claro, también por revolucionar la repostería incorporando elementos feéricos y esotéricos.
Receta del cheesecake esponjoso
Ingredientes
- 260 grs queso crema
- 30 grs mantequilla sin sal, blanda
- 65 ml de leche
- 45 grs de harina
- 3 yemas
- 3 claras
- 65 grs de azúcar
- Papel aluminio para cocinar a baño María
- Papel Mantequilla para forrar
¿Cómo preparar el cheesecake esponjoso?
- Para comenzar a preparar este cheesecake, debemos mezclar el queso crema, la mantequilla y la leche.
- A continuación, separaremos las claras en otro bol e incorporamos las yemas en la primera mezcla junto con la harina. Removemos hasta integrar.
- El siguiente paso es batir las claras con el azúcar a punto de nieve.
- Después agregamos un cuarto del merengue y mezclamos bien. A continuación agregamos el resto del merengue con movimientos envolventes hasta que todo esté bien unido.
- Precalentamos el horno a 180°C.
- Lo siguiente es preparar un molde, para esto podemos forrarlo con papel sulfurizado y con papel aluminio por fuera para impedir que se moje al cocinar a baño María dentro del horno, también podemos usar un desmoldante casero o aceite en spray o aerosol.
- Por último llenamos una olla con agua hirviendo y colocamos el cheesecake sobre ella. Finalmente, cocinamos por 40 minutos a 160/180° C.
Consideraciones del cheesecake esponjoso
Finalmente, desmoldamos y servimos, se recomienda comer este cheesecake mientras aún está tibio, aunque también podemos comerlo frío. Aunque parezca una receta sencilla, tiene algunas mañas, por ejemplo, esta tarta de queso debe cocinarse a menos temperatura de la media, por lo que 150° es el ideal pero esto depende mucho de vuestro horno y de la temperatura de vuestro hogar. Si subís la temperatura para que se haga más rápido corréis el riesgo de que se queme la superficie, entonces es mejor preparar esta receta cuando estéis libres de pendientes. Este postre se disfruta mejor solito pero podéis acompañarlo con lo que más os guste.