Cuando pensamos en la repostería francesa, inmediatamente se nos viene a la cabeza la inigualable crème brûlée o el imposible soufflé, sin embargo, hay un tercer postre que completa la exquisita triada de los dulces franceses, se trata del Mont-Blanc.Veréis que nadie podrá resistirse a esta montaña hecha de merengue y castañas, será toda una avalancha de sabores para vuestro paladar y claro, para el resto de los comensales también.
¿Qué es el Mont-Blanc?
El Larousse Cocina nos dice que es un "postre frío hecho de fideos de puré de castañas con vainilla y merengue seco, que se decora con crema montada." Por cierto, ¿sabíais que este postre le debe su nombre a las montañas de Mont-Blanc? Pues sí, esta montaña ubicada entre Francia e Italia fue la inspiración para esta delicia culinaria. Como curiosidad, el portal Climb Mont-Blanc nos dice que esta es la montaña más alta de Europa Occidental y los Alpes.
¿Cómo preparar el Mont-Blanc de castañas?
Ingrendientes
- 150 gr de crema de castañas
- 200 gr de confitura de castañas
- 60 gr de merengues
- 1 y media tazas de nata líquida
- 30 gr de queso Philadelphia
- 1 cda de extracto de vainilla
- 1 cda de azúcar glas
- 9 castañas confitadas
Receta paso a paso del Mont-Blanc de castañas
- En un bol amplio añade la crema de castañas junto con la confitura de castañas. Mezcla bien.
- Lleva el preparado a una manga pastelera con una boquilla fina y reserva en la nevera.
- En otro bol mezcla el queso Philadelphia con el azúcar glas y la vainilla. Reserva.
- Monta en otro recipiente la nata líquida con ayuda de una batidora eléctrica a gran velocidad y después, incorpora poco a poco la mezcla con el bol del queso, azúcar y vainilla.
- Sigue batiendo hasta obtener una crema homogénea. Lleva esta mezcla a otra manga pastelera.
- Tritura los merengues y coloca los trozos en el fondo de los vasos o recipientes que vas a utilizar para el postre.
- Sobre los merengues ve poniendo con mucho cuidado la primera capa de la crema de castañas, forma la capa en espiral con ayuda de la manga pastelera.
- Coloca por encima en forma de espiral una capa de nata y alterna sucesivamente, hasta finalizar con una generosa capa de crema de castañas.
- Corta las castañas confitadas en trozos pequeños y agrégalos por encima de la crema para darle un toque crocante al postre.
- Lleva el Mont-Blanc a la nevera por lo menos 1 hora.
- Deja un par de minutos a temperatura ambiente antes de servir y disfruta.
Extra tips: Para hacer un gran postre en lugar de porciones individuales, solo hay que colocar todos los ingredientes en capas en un molde amplio de cristal. Podéis acompañar este postre con café para conseguir un mayor contraste con su sabor dulce. Por otro lado, si os resulta muy complicado conseguir castañas, podéis sustituirlas por plátanos.