Esta semana, ha sido la semana del roscón de Reyes. En todas las casas ha habido uno o más de uno, y puede que todavía queden algunos trozos que ya cuesta comer porque están algo duros. Antes de tirarlos, es mejor darle una nueva vida, y crear una nueva receta como esta que hay, a continuación, de pudín de Roscón de Reyes. Un dulce para chuparse los dedos.
Ingredientes para el pudín:
- 1 litro de leche, del tipo que se suela beber en casa.
- 6 huevos.
- Sobrante de roscón de Reyes, unos 150-200 gr.
- 4 cucharadas de azúcar.
- Caramelo líquido.
Receta de pudín de Roscón de Reyes
Esta receta que invita a aprovechar hasta la última miga de el roscón de Reyes, empieza desmenuzando en un bol lo que haya sobrado de este dulce. Al menos tiene que haber unos 15-200 gramos de roscón para que el pudín quede bien contundente. Al roscón desmenuzado, añadir las 4 cucharadas de azúcar y reservar, para elaborar este pudín.
En un cazo al fuego, hay que calentar el litro de leche. No es necesario que llegue a hervir, la idea es que al estar caliente el bizcocho del roscón se deshaga y se ablande. Una vez esté caliente la leche, hay que añadirla lentamente, al bol donde está el roscón con el azúcar, y se mezcla todo bien para que vaya creando una masa.
En otro bol se baten los huevos y se añaden al cuenco, para volver a mezclar todos los ingredientes de nuevo. Mientras se va precalentando el horno a unos 170ºC. En un molde para horno, colocar en la base el caramelo líquido. Si no se tiene, se puede hacer con cuidado y paciencia en una sartén con un poco de agua y azúcar. En ese caso, hay que tener mucho cuidado, puesto que las quemaduras de caramelo son muy dolorosas.
Una vez puesto el caramelo en la base del molde, se vierte la mezcla del roscón, el azúcar, la leche y los huevos y se mete en el horno, encima de una bandeja de horno con agua, para poder hacer el pudín al baño maría. Hay que dejar que se haga durante, al menos, 40 minutos. Pasado ese tiempo, pinchar con un palillo para ver si está hecho, si le palillo sale limpio, es hora de sacar el pudin, si no, dejarlo unos minutos más. Una vez esté el pudin hecho se saca, y se deja enfriar. Se puede meter en la nevera, puesto que cuando está frío está más sabroso, o eso dicen. Algunas personas lo acompañan con un poco de nata montada.